viernes, 22 de febrero de 2008

La chica del perro

Esta es la historia de una chica. Una chica que cumplió los veinte años y,como regalo de cumpleaños, su padre le concedió una casita en el campo, concretamente en la cima de una colina. Recién mudada en la casa de sus sueños, acababa de instalarse en su chalecito en elmonte con un único acompañante: su perro, un bonito pastor alemán. Cumpliendo la primera noche en su nueva casa de forma poco original(viendo la tele)se sorprendió al ver en las noticias que un asesino demente al que se le acusa dehaber asesinado brutalmente a su familia y vecinos, había escapado esa misma nochehace dos escasas horas del manicomio de la colina contigua en la que se situaba suchalecito recién estrenado. Esto provoco un gran pánico en la veinteañera, quedecidió acostarse, dada la hora que era. Tuvo que dormir en el sofá del salón, pues su cama aun no había sido instalada, loque la incomodó aún más.Pasaron unos m minutos cuando... ¡BRAUMM!, sólo un trueno. Cuando el miedo la poseía,bajaba la mano para que su perro la lamiera, lo que le producía tranquilidad. Derepente, sonó un crujido. Bajo la mano...y el perro se la lamió... no pasaba nada.Otro crujido... esta vez más fuerte. Entonces se oyó un ruido de madera rompiéndoseseguido de lo que pareció el ruido de la puerta al abrirse... la chica, intentandoconvencerse a sí misma de que había sido producto de su imaginación, bajó la manodel sofá y la sensación de tranquilidad volvió de nuevo al notar la lengua de suquerido perro recorrer su piel. Apenas pasaron unos segundos cuando se oyeron pasos. Silenciosos pasos queretumbaban con la fragilidad de un vaso de cristal fino en los oídos de la muchacha.A continuación le pareció oír una especie de goteo continuo: CLOC... CLOC...CLOC... No quería levantarse, tenía miedo, así que bajó la mano para que el perro se lalamiera. Pero aunque le lamiera las manos toda la noche el goteo seguiría ahí:CLOC...CLOC...CLOC... a si que decidió levantarse a buscar la gotera. Empezó por lacocina, pero no había ninguna gotera ahí. Miró por todos los grifos de la casa y porlos baños, pero no encontró ninguna gotera. Sin embargo el ruido de goteo seguíaahí: CLOC...CLOC...CLOC... Decidió irse a dormir y buscar el goteo por la mañana, que se veía mejor. Pero elendemoniado ruido no la dejaba dormir. Bajo la mano para que su perro la lamieraantes de levantarse, y entonces cayó. Aún no había mirado en el lavadero del garaje.Emprendió camino hacia el lavadero y en cuanto abrió la puerta deseó no haberlohecho nunca: vio a su pastor alemán ahorcado con gotas de sangre goteando por sucuello, lo que provocaba el ruido. Pero, os preguntareis, si su perro había estadomuerto desde el goteo, ¿quien le chupaba la mano a la chica? ¡EL LOCO!

lunes, 4 de febrero de 2008

Llamadas

Esta leyenda que voy a relatar me la contaron cuando iba al colegio y todavía hoy no he podido olvidarla. Espero que les agrade:La joven subrayaba el anuncio del periódico mientras se lo mostraba a su novio. Sin pensarlo dos veces concertaron una visita con la inmobiliaria. Por fin, después de varios días de intentos fracasados habían encontrado un buen apartamento y a un precio lo bastante asequible para una pareja de recién graduados. Una noche, después de tres días de agradable convivencia, la joven se despierta alertada por un sonido que todavía no le era familiar, extrañada se dirige al teléfono y levanta el auricular:- Dígame – dijo desconfiada la chica. – ¡¡¡Ayúdame por favor!!!.Asustada, cortó la comunicación inmediatamente.- No será nada, se habrán equivocado – dijo para tranquilizarse. En ese mismo instante se quedó totalmente paralizada, alguien, una presencia, podía sentirse justo detrás de ella, incluso podía escuchar su respiración, al intentar girar la cabeza:- ¿Quién era? ¿Por qué llaman a estas horas? – Que susto me has dado, podrías haber avisado; no ha sido nada, alguien que se ha equivocado, vamos a dormir -.En los siguientes días las llamadas se repitieron y pronto se dieron cuenta que todos los viernes sobre la misma hora el teléfono sonaba y aquella voz sollozante susurraba:- ¡¡¡Ayúdame por favor!!!.La pareja asustada acudió a la comisaría más cercana para poner una denuncia y saber desde donde se estaban realizando aquellas misteriosas llamadas. Pronto averiguaron que aquel número de teléfono pertenecía a la vecina del apartamento de enfrente. Justo desde allí al lado se estaban realizando aquellas llamadas. La joven se acercó al piso de su vecina y le contó lo que estaba sucediendo, pero la muchacha asombrada se defendió diciendo que nunca había realizado tales llamadas, además era imposible, ella trabajaba de noche los viernes.Todo quedó ahí, y aunque aquella chica hubiese dicho que no era ella la pareja sabía perfectamente que esas llamadas se estaban realizando desde su apartamento. Desconfiados esperaron al viernes de esa misma semana para espiar sus movimientos, cuando entraba, cuando salía, y tal como les dijo, al llegar la noche la chica abandonó su vivienda y no volvió a entrar. Al cabo de unas horas el teléfono sonó, puntual como siempre, a la misma hora de cada viernes y con la misma voz pidiendo ayuda.Después de la llamada, aquella noche, la pareja no durmió, estuvieron esperando durante horas hasta que la vecina llegó y antes de que entrara a su casa salieron y le expusieron lo que había ocurrido, entraron al apartamento y el chico vio una extraña mancha en la pared, aquella mancha no era normal, no parecía una mancha de humedad provocada por alguna fuga o filtración de agua, más bien, era como una enorme mancha de aceite, algo grasiento, fresco y de donde parecía emanar un olor especial, algo que no había sentido nunca antes. Pronto llevado por la intuición y la curiosidad él dijo:- Tienes que tirar esa pared, esa mancha de humedad no es normal – Dijo el joven.- No hay forma de deshacerme de esa mancha, por más que friego siempre aparece de nuevo - Dijo la vecina que había observado la mirada del joven.- ¡Confía en mi¡, tienes que hacer un agujero en la pared.- ¡Estás loco o que!- - Nosotros te ayudaremos a reconstruirla una vez averigüemos la causa por la que no puedes deshacerte nunca de ella. La vecina aceptó y sin pensarlo picaron la pared y ahí encontraron el cuerpo podrido de una chica envuelto en una bolsa de tela y mal cubierto en cal. Luego se supo que por la atmósfera que se había creado en aquel agujero el cuerpo había ido descomponiéndose muy lentamente teniendo todavía jugos que iban filtrando por la pared poco a poco.Siempre que muere alguien debe ser sepultado adecuadamente, o estarán acá hasta que alguien pueda ayudarlos.